La última prueba del circuito estaba prevista para el sábado 7 de abril. El día antes nada hacía presagiar que el parque pudiera estar en condiciones para el contest. Hacía un temporal de los de revival y hacia las siete de la tarde habían caído en menos de dos horas 25 cm de nieve. Los shapers de Fiat fueron a tantear los módulos y los saltos ya casi imperceptibles y ante la imposibilidad de cualquier movimiento decidieron surfearse las pistas. Estaba mal la cosa.
El sábado la historia dio un giro radical. Hacia las seis de la mañana estaba de nuevo toda la trupe en el parque con una predisposición de héroes para shapearlo. Era la última prueba del circuito y nadie ni nada podría estropearlo. Nada más despuntar el sol por detrás de las montañas, todo el team supo que ese era el día. Nadie dijo nada a nadie, pero todo el mundo tuvo la sensación que ese mismo día le darían a Fiat su primer equipo de Freestyle de snowboard y de esquí y ese mismo día alguien se acostaría pensando en su viaje a Nueva Zelanda.
La pre-mañana transcurrió bañada en un amalgama de sensaciones: se intentaba mantener la calma pero el nerviosismo, la excitación y las prisas fueron los reyes del parque hasta que aparecieron los riders y esquiadores. Un parque perfecto, por cierto, recién espolvoreado y con unos módulos de lo más apetecibles. Esa fue la culminación de toda aquella bullície matutina preocupada por que todo quedara immejorable. Ahí todos trabajaron, hasta el cámara le estaba dando a la pala.
El circuito constaba de un slope-style de lo más variopinto: un kicker de doce metros abría la sesión, a su izquierda un cajón en plano bajada y a su derecha una barandilla en plano bajada también. Un poco más abajo, un cajón en gap y otro en forma de ola y cerraba el parque un cajón de un metro por ocho metros de largo.
Finalmente llegó la hora de las inscripciones. Esa hora en la que todos están pendientes del gentío que viene a participar y que determina el día tanto como la nieve. En total unos 50 participantes que se distribuyeron en tres categorías: esquí, snow y snow femenino.
Por supuesto, una vez más, no faltaron el séquito de riders y esquiadores que hasta ahora habían escoltado el circuito y que le han dado la textura que tiene. Josep Gil, los hermanos Albadalejo, Paco Berenguel, Leo Tarrat, Javi Vega, Santi Gámen, Dídac Corvo, Cristian Ordóñez y muchos otros igualmente dignos de mención. En esta ocasión también pudimos disfrutar del savoir faire de dos freestylers en potencia: sobre los esquís, Loren, local de Sierra Nevada y en la tabla, Fer Natalucci, argentino asentado en Sierra Nevada.
¿Y los trucos? Pues de los que te dejan sentado: un 360 Fard mute de Josep Gil, un switch 720 Fard Mute de Benguerel o un 270in en cajón en gap de Noah. En snowboard se vieron tyndies, un cork 5, pero el que se llevó la palma fue el cork 7 de Fer. Nada nada mal.
Después de tres rondas clasificatorias en las que los participantes le pudieron dar a los módulos sin problemas y demostrar sus dotes sobre la y las tablas, el circuito llegó a su clímax: los jueces, por unanimidad, volvieron a dar su visto bueno al jibbing de Paco Benguerel en esquí y se estrenaron con Fer Natalucci, quien impresionó por su estilazo en snowboard.
Clasificación
de snowboard másculino
1-Fer Nataluchi
2-Santi Gamen
3-Cristian Ordoñez
4-Fali Oh Samba
5-Sebastian Roth
6-Alex Verano
7-Didac Corvo
8-Chapas
Clasificación
de snowboard femenino
1-Peque
2-Marcia Soler
3-Mariate Quiles Ruiz
Con motivo del
cierre de temporada y del circuito, la organización está preparando
una fiesta en la que se premiará la participación y la fidelidad
de los competidores y en la que se entregarán los premios a los ganadores.
En la fiesta también se desvelará el nombre de los nuevos miembros
del equipo Fiat Freestyle. En breve sabremos cuándo y dónde se
celebrará, aunque también podéis mirar la página
web www.fiatfreestylezona.com.
Os recomendamos que no os la perdáis, será la última party
de la temporada y estará muy pintona.
Como habréis podido comprobar a través de todas las pruebas del
circuito, el éxito ha acompañado en todo momento este proyecto,
no sólo por la cantidad de participantes o de espectadores, ni siquiera
por el tiempo, que siempre ha estado de su lado, sino que, el éxito ha
estado avalado en todo momento por la fidelidad y las esperanzas que ha demostrado
todo el mundo por igual. Y por ello Fiat os quiere dar las gracias. A Port Ainé,
a Vallnord, La Molina y Sierra Nevada, al Team Vallnord, a todos los riders,
a la organización, a los shapers, al fotógrafo venido a shaper
ocasional y a todos los medios que han seguido el circuito día a día.
Mil gracias.
Esto no es un adiós, es sólo un hasta luego, así que la organización os espera la próxima temporada para que aportéis vuestras ilusiones para este proyecto común: el freestyle en estado puro.
Hasta muy pronto.