Pic de la Dona, por Xemeneies.
Volvemos al circo de Ulldeter, donde se ubica la estación de esquí de Vallter 2000. Este inicio de temporada, todavía en el mes de Noviembre, ha dejado importantes cantidades de nieve en el pirineo más oriental, y la cota de nieve se encuentra hacia los 2.200m de altitud. Esto conlleva que la estación de esquí de Vallter sea el acceso más fácil a la nieve, permitiendo bajarse del coche con los esquís puestos, casi literalmente. Esto es un auténtico lujo y no sucede todos los años, ni mucho menos, así que hay que aprovecharlo. Ya habrá tiempo de mostrar otros rincones del pirineo.
En esta ocasión nos reunimos Blanca, Pablo, Oscar, Abel y yo, Rafa, con la intención de hacer una ruta fácil, para que aquellos que quieran iniciarse en el snow o esquí de travesía sepan qué pueden hacer para comenzar. El Pic de la Dona és una cima inmejorable para ello puesto que si se quiere no hace falta hacer ni una sola vuelta maría, que es como se conoce el cambio de dirección mientras se asciende.
El recorrido que efectuamos no tiene ningún misterio puesto que se sale des de la base superior de la estación, donde está el núcleo de ella, y se asciende siguiendo la traza de los teleskis de debutantes para continuar al lado de la traza del teleskí de Xemeneies.
Una vez dejamos atrás el reenvio del teleskí, nos alejamos del dominio de la estación de esquí de Vallter y sólo es necesario seguir subiendo por el valle, que tras un giro hacia el Este (a derechas) nos dirige directamente hacia la cima.
El camino habitual discurre por el lado izquierdo del valle puesto que es donde la pendiente es más suave, pero también es el camino más peligroso. Por encima de nosotros se encuentra una barra rocosa y es frecuente que haya grandes cornisas de nieve esculpidas por los fuertes vientos de norte (tramontana). Foquear debajo de estas cornisas no es lo más adecuado, así que si se dan estas circunstancias, lo mejor es cambiar de lado del valle y ascender por la parte derecha de éste. Sin embargo, ésta vez no hay cornisas, así que seguimos subiendo hasta que en los últimos metros cambiamos hacia la zona derecha y ganamos la cumbre sin hacer una sola vuelta maría.
Encaramos el tramo final, Abel va en cabeza sintiendo lo fácil que se sube con la splitboard en vez de tener que llevar la tabla a la espalda. Esto marca diferencias!
Mientras tanto observamos como el descenso del Pic de la Dona parece más el comienzo de una pista de esquí cualquiera que una montaña sin remontes. Hay mucha afición al esquí de travesía por estas tierras.
Una vista hacia atrás mientras subimos y vemos el resto del grupo, más rezagado, que ya ha hecho el giro hacia Levante. Ahora sólo queda un último esfuerzo.
Unos metros antes de llegar a la cima un fuerte viento de norte nos daba la bienvenida con ráfagas que seguramente superaban los 100km/h. La verdad es que por el fondo del valle se sube muy a gusto y no nos hubiéramos percatado del fuerte viento de cumbre de no ser por la nieve granulada que iba cayendo sobre nuestras cabezas empujada por él.Por fin llegamos, en medio del gran vendaval, pero las vistas eran espectaculares.
En la zona superior, Oscar y su telemark dejando atrás el vendaval de cumbre (vídeo cedido por Pablo).
Y por último, el aspecto que presentaba el Gra de Fajol Gran, con el torb en la cima
