La ruta planteada y aproximadamente realizada es la que os muestro a continuación el siguiente mapa topogràfico (ascensión en verde y descenso en azul). Como podeis observar nuestra intención es coronar el Pic de lHortell para descender hasta la mismísima carretera de acceso a la estación, justo antes del túnel carretero (no debemos olvidar que ya estamos en Mayo).
Me encontré con Jesús en Ripoll, según el horario planeado (5:30am), y rápidamente nos pusimos en marcha hacia Andorra. Llegamos a Ordino a las 8:00 am, y realmente nos quedamos asombrados de la cantidad de nieve que todavía quedaba, sobretodo despues del calor que había hecho las dos semanas anteriores desde que la estación diera por concluida la temporada.
Empezamos los preparativos, sin prisas pero sin pausa, no en vano queda por delante un buen esfuerzo y no es cuestión de quemar emergías que luego puedan hacer falta.
Jesús se deleita y se entretiene mientras me espera :-)
Este era el aspecto de la pista LHortell (roja) en su llegada al telesilla LAbarsetar, completamente esquiable excepto algunas zonas puntuales que no lo estaban. De todas formas no creo que aguantasen el paso de hordas de esquiadores, pero si un reducido número de ellos.
Ya llevamos un ratito subiendo, y yo le pregunto con la lengua a fuera......"¿ Jesús falta mucho?" :-D
Estamos el plena ascensión por la pista de lHortell (los coloretes de mi cara lo demuestran) y relativamente cerca del final del teleskí de lHortell. En este punto, estudiando el recorrido y lo que el panorama nos ofrece, podemos ver el gran espesor de nieve que todavía queda en la mayor parte de las pistas.
La ascensión se hace llevadera, la pendiente es progresiva, en algunos puntos nos pone a prueba (tampoco hace falta una gran pendiente para ponernos a prueba jejeje). Jesús progresa unos metros delante mio.
Aproximadamente en esta posición nos vamos dando cuenta, y temiendo, que no podremos ascender directamente al Pic del Hortell desde la estación superior del telesilla Abarsetar. Así que decidimos cambiar ligeramente de planes y nos dirigimos hacia la llegada del teleskí lHortell, desde donde afrontariamos el tramo de ascensión más empinado.
Hemos llegado a la estación superior del teleskí LHortell, y al fondo podemos ver el Pic de lAbeille (2788m) i a la derecha el Pic des Fangasses (2682m), con una cantidad de nieve todavía envidiable, sobre todo para ser cara sur, y es que esta temporada, los frentes han venido de norte pero con mucho viento, lo que se traduce en que las caras sur tienen grandes acumulaciones de nieve. Las caras norte, por el contrario, no pueden decir lo mismo, están más bien peladas. De todas formas, la gran cantidad de nieve es altamente inestable como despues pudimos comprobar en el descenso.
Afrontamos la última pala que pudimos subir con las raquetas de nieve, más adelante ya no las necesitaríamos.
Después de llegar a la cuerda que nos llevaría al Pic de lHortell, seguimos ascendiendo, ya sin nieve por desgracia, hasta un lugar cerca de la cumbre. Desde allí pudimos observar el tan famoso descenso hacia el Serrat (a 1562m), en el fondo del valle y en el centro de la imagen, sólo apto para condiciones de buena innivación y expertos esquiadores. No debemos olvidar que estamos fuera de los límites de la estación y cualqueir descenso que realizemos lo hacemos bajo nuestra reponsabilidad y riesgo.
Ya en la cumbre toca relajarse, observar el gran panorama que nos brindan las montañas con su paisaje primaveral, y por que no, estudiar el terreno para posibles descensos en épocas más propicias. En la imagen podemos observar la cara norte del Pic de les Fonts (2749m) y al fondo, a la derecha de la imagen, perteneciendo a otro valle, la cara norte del Pic de Comapedrosa (2942m) techo de Andorra. Como se puede observar, la condicion nivosa de las caras norte no tiene nada que ver con la que hay en las caras sur.
Por cierto, en esta instantánea no sólo se ve que me encanta la nieve sino que soy un auténtico "Malalt de neu" ;-)
Desde la cima del Pic de lHortell se nos abre la otra gran bajada que sólamente se puede realizar en años de gran innivación. Es el valle que llega hasta el pueblo de Llorts (a 1400m). Esta bajada probablemente no será especialmente adrenalítica, sobre todo en su tramo inferior, pero no dudo que puede tener un especial encanto, sobre todo por el túpido bosque que se adivina.....
Decidimos comenzar el descenso y aunque lo comenzamos en ausencia de nieve, no podemos dejar de imaginar lo que se puede llegar a sentir si está cubierto de nuestro ansiado elemento. El comienzo del descenso sería una pista azul (y quizás algunos tramos de una pista verde), siempre por la cuerda de la montaña. Cualquier desvió hacia la derecha nos empujaría fuera de la cercanía de la estación y muy lejos de un retorno fácil al parking de la misma, por no hablar de la pendiente, que directamente supera el de una pista negra. Al fondo las dos cimas mencionadas con anterioridad nos vigilan.
Hemos llegado al comienzo de la nieve y nos proponemos a comenzar el desceso.
Lo primero que nos encontramos fue con la posibilidad de descender por un auténtico embudo. La situación es prometedora, pero como hemos podido comprobar durante la ascensión, lo más probable es que una vez pasado el estrecho rocoso nos encontraramos sin nieve y lo que es peor aún, muy alejados de la ruta que queríamos hacer. De todos modos, comenzar bajando por una especialmente empinada pendiente no es la mejor manera de encadenar los primeros giros. Así que decidimos desistir y buscar el camino bueno.
A partir de aquí comenzamos el descenso de verdad, pero como es cuestión de saborearlo bien decidimos bajar por turnos y tranquilamente.
Jesús en acción:
Quizás en las fotografías no se aprecie bien la pendiente, pero todo el recorrido tiene un buen procentaje.
Ahora freeride (un servidor) en acción:
La calidad de la nieve era ya muy pastosa, tipo hielo de pescadería, pero como no era la típica nieve de pista, por donde pasan cientos de personas, era muy esquiable. Se daba la circunstancia que unos días antes había caido una ligera nevada de unos 5 centímetros de espesor. Esta pequeña capa de nieve se desprendía al nuestro paso y deslizaba pendiente abajo, generando minialudes de nieve húmeda y pesada, que en este lugar no eran nada peligrosos, pero que nos indicaban que pendientes expuestas y más cargadas podían ser determinantes.
Jesús comienza el flanqueo hacia la izquierda que nos conducirá por el buen camino (flanqueo que se aprecia en el mapa inicial de la ruta)
Jesús en un pequeño aprieto al hacer el flanqueo, digamos que no entro por donde debiera...:-)
Jesús comienza una de las palas, con estilo y soltura, estamos en nuestra salsa.
Y ahora me toca a mi, con mi estilo peculiar....
Después de un buen descenso llegamos a la parte baja, la nieve comienza a escasear, pero todavía es más que suficiente, de hecho lo será hasta la mismísima carretera. Nos disponemos a afrontar un tramo de especial recuerdo para nosotros, de hecho en el reportaje Un sábado en Ordino Hay una fotografía donde se puede ver a Pepe Nevasport en una situación un tanto peculiar encima de la gran roca.
El estrecho canal es ligeramente complicado en esta época del año, así que decidimos no complicarnos la existencia y sortearlo sin arriesgar en absoluto. En las siguientes imágenes vemos a Jesús sorteandolo.
Estamos ya en la última parte del recorrido, la nieve escasea, pero sigue siendo suficiente para llegar hasta la carretera sin poner en peligro ni nuestra integridad física ni la de nuestras tablas. Aquí va una muestra de ello en la que se me ve a mi sorteando los árboles y arbustos.
Y hemos llegado al final del recorrido, la carretera de acceso a Ordino Arcalís, antes del túnel de acceso. Ha sido un descenso peculiar, algo frustrante en su parte superior por la escasez de nieve pero tremendamente esperanzador por las posibilidades que ofrece a expertos esquiadores. La cara de felicidad de Jesús delata la experiencia vivida.