Fiel a sus principios, el ANF –esta temporada cuenta con el copatrocinio de Nike 6.0– se escenifica en el mismo escenario de siempre, el párking de El Tarter, y, al igual que en años anteriores, el equipo de Coliflor Freestyle se encargará una vez más de la fabricación de los módulos. Edición tras edición, su puesta en escena sorprendre a riders y aficionados. Los primeros saben que su presencia en la prueba es obligada, pues es una de las más prestigiosas, por no decir la que más, de la Península; y los segundos saben que el espectáculo que se escenifica es de alto voltaje. De ahí que nadie quiera perderse el Atomic Night Fever.
Novedad: categoría open
Hasta la fecha, el Atomic Night Fever era un evento invitacional con la presencia de los mejores riders de freeski y snowboard del país. Esta propuesta se mantiene, pero, con vistas a hacerlo más accesible y a dar una oportunidad a todos los aficionados, este año hemos innovado. Damos la posibilidad a dos elegidos a medirse con los mejores pros del país. La metodología a seguir es sencilla. El mismo día 23, a las 10.00 horas, se celebrará una competición de barandillas en el snowpark de El Tarter. El ganador en freeski y el ganador en snowboard se harán merecedores de una invitación para participar por la noche en el Atomic Night Fever.
Falta por ver cuál será el rendimiento de estos dos riders invitados, que a buen seguro venderán muy cara su derrota. Animados por las cerca de mil personas que año tras año llenan a rebosar el párking de El Tarter tendrán que exprimirse al máximo para plantar cara a los Luka Meloni, Josep Gil, Albert Martínez, Bryan Longley, Randolph Dutrieux o Merlin Balfour; riders que en la pasada quinta edición coparon el podio.
Expression session
En su sexta edición, el Atomic Night Fever seguirá celebrándose en el formato Expression Session. Es decir, que los riders participantes tienen una hora y media para realizar tantas rondas como quieran, bajo la atenta mirada de los jueces, siguiendo el movimiento que desde los platos marque el dj Lluc Navarro. La clave para aspirar al podio pasa por “aprovechar al máximo los módulos que haya, y por realizar un truco innovador en todos los módulos del trazado”, explica Enric Bonvehí, responsable de freestyle de Grandvalira y una de las almas de este evento. Enric apunta que la línea de jibbing que van a dibujar para la noche del sábado 23 de enero es aún un secreto, aunque sí que nos avanza que se va a contar con la presencia de un coche 4x4 espectacular, que los riders tendrán que pasar por encima, así como varios elementos más que todavía se mantienen en el más grande de los secretos, pues las sorpresas de última hora es uno de los platos fuertes del Atomic Night Fever. Una prueba en la que la clave para salir airoso es “aprovechar al máximo el terreno, buscando la vertienente street más de jibbing. Se trata de una cita de freestyle pensada para los riders a los que les gusta las barandillas y donde los chavales lo dan todo”, especifica Enric Bonvehí.
Después, una vez realizadas las respectivas rondas, de recibir el calor de la afición, todos de cabeza a la clásica fiesta en la discoteca Nemo, donde aún habrá alguna que otra sorpresa preparada, y donde Lluc Navarro y su grupo de música se encargará de amenizar la velada.