El nuevo dominio esquiable de Porte des Neiges esta situado en la montaña del Pedrús, justo al lado francés de la frontera con Pas de la Casa, que está delimitada por el río Arieja.
La estación, la primera que une dos países en los Pirineos, se inaugurará esta temporada con la entrada en funcionamiento de un telesilla desembragable de seis plazas. La instalación tiene 1.200 metros de longitud, un desnivel de 175 metros y una capacidad de 3.000 personas/hora. Las obras del remonte están en la fase final y entraran en funcionamiento esta temporada permitiendo crear una área esquiable de 2,3 km. que se comunicará con el sector de Pas de la Casa, de Grandvalira. De momento, se abrirán dos pistas de pendiente moderada y categoría azul – 1.360 m y 530 m – que permitirán descongestionar la zona de debutantes del Pas. Para esta instalación, que incluirá el acceso a los dos telesquíes de Pas, se pondrá a la venta un forfait especifico de unos 21 euros, aunque el forfait de Grandvalira será valido para esta zona.
Durante la presentación de la nueva estación, tanto el promotor Salvador Fernández, impulsor del dominio desde el año 1971, como Joan Viladomat presidente de Domaine Porte de Nieges, la sociedad que gestiona la nueva estación, destacaron las facilidades dadas por las autoridades francesas que están implicadas en la revitalizar la comarca de la Arieja que ha sido declarada zona de desarrollo rural.
La nueva estación se ha concebido después de un largo proceso de maduración tanto desde el aspecto económico como medioambiental. Para reducir al máximo el impacto se ha previsto construir sólo tres remontes de ultima generación para hacer que la repercusión ecológica y paisajística sea la estrictamente necesaria. En esta primera fase que incluye los diversos estudios de impacto ambiental y la construcción del primer remonte la sociedad Domaine Porte des Nieges ha invertido seis millones de euros. En fases sucesivas se instalaran dos remontes más para dar servició a un total de 14 pistas y alrededor de 50 km de pistas, entre la que destaca un futuro trazado de descenso, lo que supondría disponer de la única pista homologada del Pirineo para carreras de velocidad. El trazado tendrá su final en un espacio próximo al paso fronterizo del Baladrà.
Este no es el primer intento de realizar una estación transfronteriza entre Francia y Andorra. En el año 1952 Francesc Viladomat, fundador de Pas de la Casa Grau-Roig, puso en marcha un remonte de cuerda en la zona francesa de Pas de la Casa, delimitada por el río Arieja. El remonte, entonces ubicado en un espacio fronterizo no excesivamente definido, no tuvo continuidad, pero seria el embrión de la futura estación de Pas de la Casa-Grau Roig, ahora englobada en Grandvalira, que Francec Viladomat creó en 1957.